Reseña 'Déjate llevar' de Sarah Dessen

¡Hola ciudadanos/as! ¿Cómo vais? ¿Habéis empezado bien la semana? Espero que, al menos, de manera algo normal. Como os dije ayer, iba a aprovechar estos días para ponerme a tope con las lecturas y con el blog, así que por ello regreso una vez más con una nueva reseña. Para hoy tengo preparada la opinión de un romance contemporáneo como es Déjate llevar de Sarah Dessen. Segundo libro que leo de la autora en mi vida lectora, había ganas de hincarle el diente, y ya puedo decir que ha sido un libro que me ha gustado. Quizás no tanto como esperaba, pero bueno. ¿Queréis saber más? ¡Os dejo la opinión completa aquí debajo!

Título: Déjate llevar

Título original: Along for the Ride

Trilogía/Saga: No

Autor/a: Sarah Dessen

Traductor/a: Victoria Simo Perales

Editorial: Alfaguara

Páginas: 456

Precio: 19,95€

ISBN: 9788420440019

SINOPSIS:

Desde el divorcio de sus padres, Auden vive con su obsesiva y exigente madre, tratando siempre de ser la hija perfecta. Ahora, por fin, podrá disfrutar de un verano viviendo con su padre y trabajando en una tienda de ropa antes de ir a la Universidad. Entonces conoce a Eli, un joven misterioso e intrigante que se convertirá en su guía en el desconocido mundo nocturno de la ciudad y que le mostrará la vida que se le ha negado: la de una adolescente

Ha pasado bastante tiempo desde que Auden no duerme por las noches. Quizás desde el divorcio de sus padres, o desde que comenzaron los enfrentamientos y se quedaba despierta para intentar calmar sus pensamientos. Quedan algo lejos esos momentos en casa, y ahora tiene la oportunidad de pasar un verano sin preocupaciones con su padre y su nueva familia en la encantadora ciudad costera donde viven. Auden quería ir allí para aprovechar el tiempo que le queda antes de entrar en la universidad para pasar tiempo con su padre, pero cuando no tiene más remedio que aceptar un trabajo en la tienda de ropa que regenta su madrastra, Auden empieza a conocer el mundo de las chicas: sus conversaciones, sus amistades, sus enamoramientos. Como alumna ejemplar, Auden nunca ha tenido la oportunidad de vivir todo eso, no estando demasiado ocupada siendo la hija perfecta para su exigente madre. Pero luego conoce a Eli, un chico solitario e intrigante y el inesperado compañero nocturno que se convierte en su guía mientras la ciudad duerme. Juntos se embarcan en misiones paralela, ayudar a Auden a experimentar la despreocupada vida adolescente que le han negado, yendo a clubes, a discotecas, metiéndola de lleno en las costumbres de la tranquila ciudad costera; para Eli, no obstante, Auden puede ser la persona que le haga aceptar la culpa que siente por la muerte de un amigo, aunque tener a Auden a su lado no va a ser tan fácil como el cree.

Como sabéis, Sarah Dessen es una autora que tuve la oportunidad de conocer hace tan solo un mes. Su anterior libro, El fin de la historia, me pareció una lectura dulce, pura y plagada de recuerdos que me gustó muchísimo. Jamás había tenido a la autora en el punto de mira como alguien cuyos libros iba a leer, pero después de dejarme con una buenísima sensación, decidí que iba a darle más oportunidades a partir de ese momento. Algo que ha llegado pronto, Déjate llevar estaba a punto de aterrizar también en nuestro país, otro libro nuevo y diferente que tenía muchas ganas de leer por las razones que os acabo de exponer. De nuevo siendo el verano el escenario principal, la historia se presentaba como una que volvía a tratar el tema del autodescubrimiento y, aunque ha sido un libro que he leído sin problemas, para mí no ha estado a la altura y me ha gustado menos que el primer libro que leí de ella.

Usando una narración en todo momento en primera persona a través de los ojos de Auden, la protagonista principal, el libro comenzará dejándonos una perspectiva, como suele ocurrir en este tipo de lecturas contemporáneas, de lo que es la vida de Auden en ese momento, los problemas que hay dentro de su familia, la manera en la que se siente con todo y su misión principal antes de terminar las vacaciones, que va relacionada con su futuro y los estudios. Andando entre historias del pasado que nos hacen comprender mejor por qué la familia de Auden es así y está tan separada, pronto caminaremos junto a ella en su decisión de alejarse de ese ambiente y probar un aire diferente yéndose a vivir, durante el verano, con su padre, su nueva mujer, y su hermana recién nacida, al pueblo costero. No obstante, lo que parecía iban a ser las mejores vacaciones pensadas pronto todo se convierte en un caos que va a estallar por todos lados.

Mientras Auden intenta poner en orden cada una de las cosas que tiene en mente, su estancia no será como ella esperaba después de escuchar a su hermana llorar sin parar durante horas, tener a su padre encerrado en su despacho todo el día trabajando en su próxima novela y hablando con Heidi, una madrastra que nunca ha tenido intención de conocer pero que, de manera sorprendente, empieza a hacerse un hueco dentro de ella. Sinceramente, estos primeros compases de la novela son los que menos me han entusiasmado. Mientras iba leyendo, por una parte me gustaba toparme ya con la exploración de diferentes temas que van a ser primordiales a lo largo de toda la lectura pero, por otro lado, me dejaban una sensación amarga al no meterme de lleno en la lectura desde el principio, teniendo la mente también ocupada con otros pensamientos, con un pie fuera y otro dentro del libro, y notando una pesadez y monotonía de las escenas que no llegaban a romper del todo para dar algo emocionante e interesante. Además, me costaba bastante comprender las conversaciones que se estaban teniendo y, sobre todo, las actitudes con las que se enfrentaban, tanto Auden como su padre, a las situaciones que tienen por delante, siendo estos primeros compases del libro escenas un tanto repetitivas que no van a decir gran cosa. 

Sarah Dessen es una autora que ya me ha demostrado que tiene como prioridad desarrollar a sus personajes y su ambiente, algo que sí es cierto va a estar muy presente mientras leemos esta parte, pero he notado que la trama no aportaba gran cosa o llegaba con poca fuerza, sin llegar a enganchar del todo a la persona que está leyendo. A pesar de ello, la lectura va mejorando poco a poco a medida que vamos avanzando, y será entonces cuando las noches vengan a salvar los días. Mientras que las mañanas y tardes de Auden, como digo, se hacen algo frecuentes y andan más o menos bajo el mismo techo, las noches van a darnos lo que estábamos buscando ya a esas alturas del libro, un soplo de aire fresco que, al fin, comienza a darnos los primeros pasos de un romance que se irá cociendo a fuego lento, donde volveremos a tocar temas como la pérdida, la muerte, los problemas familiares y, de manera primordial, el gran cambio que debemos hacer para avanzar y no quedarnos siempre en el mismo sitio. Creo que uno de los mensajes principales que Sarah Dessen quiere dejarnos con esta historia es la de madurar y dejar el pasado atrás, aceptar lo que tenemos y, más que nada, vivir. Romper cadenas y salir de la zona de confort, experimental mil y una emociones, ser valientes y enfrentarnos a todo lo que se nos ponga por delante por mucho que nos duela. Cerrar puertas y abrir otras nuevas. Es aquí cuando ya sí que estaba metida dentro del libro, disfrutando de cada momento como esperaba nada más iniciar la lectura de Déjate llevar, incluso riéndome con algunas de las bromas que se van a hacer o las peculiares situaciones que algunos de los personajes van a iniciar. Sintiéndome muy a gusto con este grupo tan variopinto que vamos a tener, acompañándolos en sus momentos más difíciles y observando como las noches son la cura que Auden necesita, ha habido acontecimientos para sonreír, para poner algo más de tensión y preocupación en las relaciones que se van a dar, para seguir desarrollando el romance, algo con lo que poco a poco me he ido haciendo más y más con la historia. Quizás no me he quedado al final con el mismo sentimiento que me dejó El fin de la historia, sobre todo cuando este libro tiene un final algo anticlimático, pero es un libro que me sigue dejando con ganas de leer más de la autora.

Aunque es algo que ya he comentado por arriba de manera breve, no solo el inicio del libro ha sido lo que menos me ha gustado de Déjate llevar, sino también el comportamiento de Auden y su padre. He intentado empatizar con la protagonista, pero pienso que no lo he conseguido en ningún momento. Auden tiene un comportamiento y carácter raro con el que es difícil hacerse y, a veces, me sacaba de quicio su pasividad y su conformidad de algunos comentarios que, mayormente, soltaba su padre. Para mí, éste ha sido el peor personaje sin dudarlo. Egoísta, egocéntrico y, lo más preocupante, machista y un maltratador psicológico en toda regla. He tenido que aguantar comentarios hacia su pareja muy feos, echándole la culpa de casi todas las cosas, no viendo que en la mayor parte del tiempo el problema era suyo. Pullas desagradables, un cobarde que prefiere alejarse de la situación antes que arreglar las cosas, me he sentido muy enfadada cada vez que Auden aceptaba y, de alguna manera, defendía a su padre mediante el silencio solo por eso, porque es su padre, sin hablarle o recriminarle su comportamiento, sin intentar arreglar las cosas, sin ayudar, incluso viendo como la persona que resulta ser la víctima sufre y llora. Quitando eso, lo demás que hay alrededor de Auden sí me ha gustado, pero no lo suficiente como para comprenderla. Pero, para seros sincera, toda su familia es un tanto complicada de tratar. Por ejemplo, y a pesar de que su madre ha tenido comentarios muy feministas que también ha dado a Auden ese tipo de perspectiva en algunas ocasiones, a veces era demasiado mordaz y cruel con Auden y las personas que la rodean, no llegando tampoco a ser alguien a quien agarrarse.

A parte de esto, mencionar también la falta de profundidad que he sentido con los demás personajes. Están ahí, muestran parte de cómo son, sus vidas y demás, pero creo que ha faltado dar un paso más. En especial, con Eli. Un chico que no me ha transmitido nada, que se convierte en el interés amoroso de Auden pero que camina siempre con una capa protectora, impidiendo que veamos realmente qué siente. Un personaje que lo he visto muy alejado, casi sin participar, me hubiera gustado tener más de él, verlo correctamente y conocerlo mucho mejor. Es como los demás personajes secundarios, que han faltado cosas por hablar para tener una figura bien montada y creada con la que dar el volumen necesario para tenerlos en cuenta.

En conclusión, Déjate llevar es un libro que, aunque no ha logrado estar a la altura del anterior libro que he leído de la autora, he podido disfrutar. Sin haber empatizado con su protagonista y su familia, y con un inicio lento, ha ido alzando la cabeza a medida que avanzaba para dejar finalmente una historia plagada de mensajes donde lo importante será dejarte llevar.

¡Mil gracias a Alfaguara por el envío del ejemplar!

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