En dicho artículo Ruth Graham indica, textualmente, que los adultos no deberían leer libros de literatura juvenil con el simple y patético argumento de que estos libros están destinados para adolescentes y no para adultos.
Además, en diversas ocasiones, la autora da por sentado que todos los libros de este género cuentan con personajes del gusto de todos y con finales simples e intrascendentes pero con los que todos los adolescentes parecen quedar satisfechos. Y me pregunto, ¿la autora tiene alguna clase de argumentos para asumir esto? ¿Alguna vez se habrá tomado el tiempo de leer opiniones de libros juveniles? Porque no puede estar más alejada de la realidad. De la gran cantidad de libros que he leído de este género, y siendo un adolescente, puedo asegurar que he leído muchos con finales que me han marcado y me han dejado pensando por un gran tiempo, y también he leído libros con finales fatales que he odiado y con personajes completamente intolerables.
Por lo ya mencionado, me atrevo a decir que los argumentos de Graham no pueden ser más inválidos. Es ridículo decir que los adultos no deberían leer literatura juvenil por el simple hecho de que no son el público para el cual fue creado. Y no solo esto, la autora también da por sentado ideas que están supremamente desviadas de la realidad y que demuestran su ignorancia en el campo.
Y Graham no es la única persona que realiza esta clase de comentarios. A diario veo en internet montones de personas que critican la literatura juvenil con la excusa de que la calidad de los libros no es buena, pero esto no es cierto. Me he topado con libros de una calidad simplemente espectacular, que me han dejado maravillado, y con otros bodrios de los que prefiero no hablar. Pero esto no es solo en la literatura juvenil, esto pasa en cualquier género.
También es muy recurrente ver que las opiniones de los demás son fuertemente criticadas por el simple hecho de que son diferentes a las mías.
Por esto decidí unir mi blog a la iniciativa I read YA, con el fin de que nadie se avergüence de decir que le gusta la literatura juvenil, porque lo bonito de esta comunidad es ver la diversidad de opiniones y apreciar y respetar las de los demás. No tiene sentido privar a las personas de tener libertad a la hora de elegir qué libro leen, ni crear una especie tabú con respecto a esto
Si no fuera por los libros de Los juegos del hambre, jamás habría llegado a leer grandes clásicos de la literatura universal como lo son las obras de Shakespeare. Porque muchos pensarán que la literatura juvenil es basura, pero para mi y sé que para muchos más es la forma de adentrarse en el mundo de la literatura. Comencé con esa trilogía hace más de tres años, y desde entonces no puedo parar de leer. Obviamente la idea no es estancarnos en el género, la idea es cruzar barreras, adentrarnos en nuevos mundos y explorar lo desconocido.
Esta iniciativa es una invitación para que todos compartamos el amor por la literatura sin importar lo que leamos, invitemos a que aquellos que no leen a que lo hagan y así esta comunidad pueda crecer más día a día. Así mismo, queremos crear una reflexión para todos aquellos que han juzgado los gustos de los demás, porque la belleza se encuentra en la diversidad. Sería muy feo que todos pensáramos y opináramos igual, que a todos nos gustara lo mismo. De esta forma, espero que en un futuro muy cercano haya más respeto y se valore más lo que piensan y opinan los demás.
¿Cómo unirse a la causa? Todo es muy simple, con una simple difusión, con usar el hashtag #IreadYA, respetando opiniones diferentes a las nuestras, cada uno decide como participar, todo con el propósito de acabar con tantas ataduras que tenemos a la hora de manifestar lo que nos gusta leer y dar nuestras opiniones,
Aquí les dejo algunos enlaces de artículos que me parecieron muy interesantes:
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