¡Feliz Viernes! Y, aunque todavía no haya arrancado, espero que tengáis un feliz fin de semana. El Verano está a punto de aparecer (madre mía, que rápido pasa el tiempo), y yo sigo igual, leyendo y trayendo las reseñas a tiempo mientras la calor empieza a caer fuerte por aquí. Hoy os traigo mi opinión sobre La Pirámide Roja, el inicio de esta trilogía que Rick Riordan escribió después de Percy y no entiendo porqué no tiene más fama. Sin dudas, es un libro para pasárselo bien y desconectar un rato ya que no nos vamos a encontrar ante una trama dificultosa. Me ha gustado mucho este libro y he de decir que tampoco entiendo porque hay más malas críticas que buenas. Si os gustó Percy Jackson, los hermanos Kane también vienen con fuerza. ¡Más abajo!
Título: La Pirámide RojaTítulo original: The Red Pyramid
Trilogía/Saga: Sí
Autor: Rick Riordan
Editorial: MontenaPáginas: 480
Precio: 16,95€
ISBN: 9788484417552
SINOPSIS: Todo empezó en Londres, la noche en que nuestro padre hizo explotar el Museo Británico con un extraño conjuro. Fue entonces cuando nos enteramos de que, además de un reconocido arqueólogo, era una especie de mago del Antiguo Egipto. Rodeado de valiosas antigüedades, empezó a entonar extrañas palabras... Algo debió de salir mal porque la sala quedó reducida a escombros; Set, el dios del caos, apareció de la nada envuelto en llamas y a nuestro padre se lo tragó la tierra... No puedo decirte nada más; el resto deberás descubrirlo tú.
¿Os he dicho ya que adoro la mitología, sea griega, romana, egipcia, nórdica o proveniente de un planeta lejano ubicado en otra galaxia? ¿No? Pues lo digo otra vez: amo la mitología. Por eso aquí me hallo de nuevo, recién salida de una aventura que me ha adentrado directamente en las profundidades de la historia de ese antiguo imperio conocido como Egipto. Meterme en una lectura así, donde se me da la oportunidad de conocer cosas que no sabía o de ampliar mis conocimientos sobre un tema que conocía más o menos, siempre es un placer. la saga de Percy Jackson ya me había emocionado hace unos meses atrás, cuando al fin me atreví a conocer esa historia y personajes. Ahora vuelvo con el tío Rick para descubrir un mundo diferente que tiene como característica principal la frescura y originalidad mezcladas con la aventura, los peligros y el importante mensaje de creer en ti mismo. La Pirámide Roja ha sido una lectura amena y súper entretenida, que me ha hecho reír en más de una ocasión y me ha abierto las puertas para volver a ser una niña y pasármelo genial.
Carter Kane es un chico de catorce años que siempre ha estado viajando de un lado para otro con su padre, el cual es egiptólogo (una rama de la arqueología centrada en Egipto). Como cada año, él y su padre viajan a Londres para reunirse con Sadie, la hermana de Carter, que vive con sus abuelos desde el momento en el que la madre de ambos murió, separada de la vida que llevan Carter y su padre. Pero en esta ocasión, Julius Kane está diferente. Las vidas de Carter y Sadie cambiarán para siempre en el momento en que Julius los lleva al Museo Británico para "estudiar" la piedra de Rosetta. Sin embargo, desde el principio ha tenido un motivo más oscuro de ir al museo y es ahí cuando llama a Osiris, el dios egipcio del inframundo, mediante el uso de la piedra como un ancla. Carter y Sadie no entienden lo que están viendo, pero cuando el plan de su padre no funciona bien y libera no solo a Osiris, sino también a los otros cuatro dioses principales, entre ellos Set, el dios egipcio de las tormentas y el caos, que encarcela a Julius en un ataúd, los chicos son conscientes de que, a partir de ahora, vivirán dentro de un mundo totalmente desconocido por el que tendrán que entregar toda su valentía y poder. Rescatados por Amos, poco a poco los dos van conociendo lo que será ahora su vida, una en la que la mitología egipcia deja de ser algo escrito o dibujado en pirámides y papiros para convertirse en realidad. Set, el dios del caos, codicia ser el amo y señor de la humanidad y, si no son capaces de parar sus planes, en poco tiempo terminará de construir una pirámide que el dará un poder absoluto difícil de vencer. Es entonces cuando Carter y Sadie empiezan a entrenarse, a reconocer sus propios poderes y enterarse de cosas que siempre habían creído como mitos. Y cuando se revele que ellos son la clave para restaurar algo que hace tiempo se perdió y que cada vez es más débil, sus vidas correrán peligro. Dioses sangrientos, seres que provocan pesadillas y una fuerza demoníaca superior son los obstáculos que los dos hermanos tendrán que ir venciendo para poder evitar que el caos se apodere de todo lo que conocían. Pero cuando los fantasmas del pasado salen a la luz y tienen que tomar la decisión de sacrificar todo lo que tienen, ¿serán capaces de hacerlo solo para salvar algo que conocen tan solo desde hace unos días?
Con una mitología egipcia que cobra vida en todo momento, Rick Riordan nos introduce en una historia de aventuras, repletas de dioses que buscan venganza y que ansían controlar mucho poder, junto a dos hermanos que se tropiezan en todo ese asunto y que se verán obligados a enfrentarse a él mientras ambos se van conociendo, van creando una unión difícil de romper y empiezan a ver quienes son realmente para crecer y confiar completamente en sí mismos. La Pirámide Roja es un libro narrado en primera persona desde la perspectiva de ambos hermanos, Carter y Sadie, para poder conocer los dos lados de una misma trama sin perder detalle alguno de como piensan cada uno de ellos y cual es su propia manera de hacer frente al sentimiento de abandono, de reencuentro y de encontrar el lugar que ambos siempre han querido tener. Es un libro que tiene sus momentos fuertes y flojos. La historia empieza bastante bien, viendo como Carter, Sadie y su padre se reencuentran para investigar algo que, de repente, explota en escenas de peligro, incertidumbre y magia. Al principio es algo liosa la información que va apareciendo porque, al igual que los protagonistas, no sabemos de que va este mundo, pero ha sido muy interesante ir conociéndolo poco a poco, que es lo que tiene de atrayente y única esta versión que Riordan ha creado. He de decir que, como todo inicio de trilogía, las primeras partes van a ser algo introductorias y lentas y se tardará un poco en volver a tener un ambiente de lucha, de correr para salvar tu vida y salir del peligro que se instalará en el argumento. Igualmente, desde el primer momento nos vamos a topar con una lectura muy ágil y entretenida que nos dará de todo: un toque fresco, un dinamismo muy bien llevado que deja en el olvido el aburrimiento y tiempos en los que tendremos que ir resolviendo el puzzle de la familia Kane. Sin embargo, a veces si que he encontrado algo más de monotonía que me ha creado la sensación de estar ante una lectura más larga de lo que debería ya que se han repetido varias escenas que me han sobrado. por todo lo demás, La Pirámide Roja es un libro que, en su mayor parte, es una trama rápida que te engancha desde el primer momento, no ya por el mundo egipcio en el que nos vamos a adentrar, sino también por una magia que también estará presente y que atrapa por completo. A pesar de esos momentos de pausa que nos dará el autor para poder coger aire y prepararnos para otra ronda de actividad en la que tendremos que enfrentarnos a despiadados demonios, la trama no decae. Es un argumento potente que sabe como mantener al lector atento a cualquier dato o suceso que ocurra. Va a destacar, sobre todo, las escenas donde muchas pruebas peligrosas se interpondrán en su camino hasta el enfrentamiento final, por lo que tendremos un libro repleto de acción, acontecimientos que nos darán más de una sorpresa ante las revelaciones de una información que se mantenía guardada y que nos dejará con los ojos abiertos, un ritmo muy fluido que no cansa y que, gracias a su ligereza, será una historia muy llevadera que se hará bastante cómoda y que dejará una sensación muy buena para seguir con los siguientes libros.
Creo que ya os podéis hacer una idea de aquello que vengo a destacar de esta nueva trilogía ambientada en una sociedad poco explotada y que da mucho juego, ¿verdad? Pues sí, quiero hablar de la mitología egipcia y lo que Riordan hace con ella, creando algo totalmente nuevo con hechos que están plasmados en la historia de la humanidad, que hacen que esta aventura sea aún más increíble y emocionante de lo que ya es. Como se nota que el autor entiende de lo que está hablando y, para llamar a esos que están empezando en el mundo de la literatura y que, probablemente, echarían para atrás un libro gordo solo de mitología, hace que este mundo sea agradable, activo, efectivo y muy ingeniosamente elaborado. Me ha encantado la mezcla que, una vez más, ha hecho entre el mundo antiguo, el de los faraones y sus propias creencias en los diferentes dioses, con el mundo actual. Gracias a ello he podido conocer mucho más de todo lo básico: como se organizaban antes en Egipto, como funcionaba el árbol genealógico de los dioses, cuales eran sus poderes, que es lo que hacían... y me ha estado entreteniendo bastante ir descubriendo poco a poco todo lo que se traían entre manos. Después, algo que también creo que le ha dado un soplo de aire fresco a la trama es la incorporación de una magia poderosa y antigua que tiene que ver con los famosos jeroglíficos. Son hechizos que hacen solamente los magos, una rama poderosa dentro de la jerarquía social de la sociedad egipcia y es algo que me ha resultado renovador. Desde hace tiempo la magia en la literatura se ha quedado algo estancada y, aunque sí haya dado con cosas diferentes en anteriores lecturas, esta magia me ha gustado porque ha conseguido dar otro lavado de cara.
La forma de narrar de Rick Riordan sigue siendo la misma que encontré cuando leí hace unos meses los primeros libros de Percy Jackson. Es un autor que va directo a lo que quiere, enganchando al lector ante cualquier giro en la trama que conlleva a una misión peligrosa y absorbente. En este libro sí que lo he visto algo más pausado y repetitivo,a largando escenas que, o bien no era necesario hacerles eso, o bien con una vez que se mostrara ya era suficiente. Pero, por lo demás, tiene una pluma inteligente que se mueve por un ambiente que conoce a la perfección. Clases de historia, de valor y de unión familiar es lo que nos da en el inicio de esta trilogía, viendo como el autor crea las cosas de manera muy fácil para su imaginación. Ha dejado momentos con los cuales me he tenido que reír sí o sí, las incógnitas a las preguntas las ha ido manteniendo ocultas hasta el final de una manera maravillosa, la ambientación es palpable gracias a sus cortas y seguras descripciones, que no han hecho más que favorecer el ritmo de lectura para cubrirnos por completo.
En cuanto a los personajes de La Pirámide Roja, Riordan también ha sabido darles forma, aunque todavía quedan cosas por conocer de cada uno de ellos. Empezando por Carter, es un chico que ha mostrado una evolución favorable a lo largo de la lectura. Al principio se veía como un chico que no se podía valer por sí mismo, que siempre tenía que tener la protección de su padre para poder salir de cualquier apuro. El haber estado viviendo con él no le ha dado la oportunidad de aprender a defenderse por sí solo y eso ha llevado a que, en un principio, Carter tuviera un miedo que lo le dejase protegerse él mismo y a su hermana, quien era la que siempre andaba detrás de él. Es un chico tímido e inteligente que, como ya digo, se va volviendo mucho más maduro y valiente, cosa que me ha gustado. Sadie es un personaje que me ha acabado enamorando por completo. Tiene las ideas claras y es bastante madura para su edad. Al sentir un rechazo que la ha llevad a vivir con sus abuelos desde que su madre murió, los celos por la vida que ha llevado su hermano se notan, pero no por ello deja de lado a alguien que quiere con todo su ser. Son personajes distintos, como el día y la noche, y es Sadie la que empieza fuerte, la que se va llenado de seguridad y no se echa para atrás cuando tiene que enfrentarse a dioses poderosos. Pero, si Cartes avanzaba hacia adelante, vemos como Sadie empieza a preguntarse todo lo que le rodea y se va llenando de inseguridades que la hace tambalearse un poco. Por todo lo demás, es una chica sarcástica con mucho carácter, con un humos y humildad únicas.
De los otros personajes, destacar a Amos, un hombre que se preocupa por aquellos a los que tiene que cuidar, defendiéndolos e intentando no llevarlos directamente a la boca del libro; Bast, una diosa guerrera que también tiene sus puntos fuertes, una mujer fuerte y decidida que también está dispuesta dar su vida por aquellos a los que tiene que proteger; Zia, una chica que saldrá poquito en esta primera arte pero que espero poder encontrar en las siguientes, alguien de carácter también muy notorio que ayudará a los hermanos Kane en todo momento.
En definitiva, La Pirámide Roja es el inicio de una trilogía de aventuras llena de mitología que aporta frescura y originalidad a las tramas de esta clase. Con unos personajes que se hacen querer, una historia de Egipto fantástica y una ambientación increíble, este libro tiene todos los ingredientes para llamarte y no soltarte hasta que has terminado de leer la última frase. Tengo ganas de seguir con esta épica aventura.
Con una mitología egipcia que cobra vida en todo momento, Rick Riordan nos introduce en una historia de aventuras, repletas de dioses que buscan venganza y que ansían controlar mucho poder, junto a dos hermanos que se tropiezan en todo ese asunto y que se verán obligados a enfrentarse a él mientras ambos se van conociendo, van creando una unión difícil de romper y empiezan a ver quienes son realmente para crecer y confiar completamente en sí mismos. La Pirámide Roja es un libro narrado en primera persona desde la perspectiva de ambos hermanos, Carter y Sadie, para poder conocer los dos lados de una misma trama sin perder detalle alguno de como piensan cada uno de ellos y cual es su propia manera de hacer frente al sentimiento de abandono, de reencuentro y de encontrar el lugar que ambos siempre han querido tener. Es un libro que tiene sus momentos fuertes y flojos. La historia empieza bastante bien, viendo como Carter, Sadie y su padre se reencuentran para investigar algo que, de repente, explota en escenas de peligro, incertidumbre y magia. Al principio es algo liosa la información que va apareciendo porque, al igual que los protagonistas, no sabemos de que va este mundo, pero ha sido muy interesante ir conociéndolo poco a poco, que es lo que tiene de atrayente y única esta versión que Riordan ha creado. He de decir que, como todo inicio de trilogía, las primeras partes van a ser algo introductorias y lentas y se tardará un poco en volver a tener un ambiente de lucha, de correr para salvar tu vida y salir del peligro que se instalará en el argumento. Igualmente, desde el primer momento nos vamos a topar con una lectura muy ágil y entretenida que nos dará de todo: un toque fresco, un dinamismo muy bien llevado que deja en el olvido el aburrimiento y tiempos en los que tendremos que ir resolviendo el puzzle de la familia Kane. Sin embargo, a veces si que he encontrado algo más de monotonía que me ha creado la sensación de estar ante una lectura más larga de lo que debería ya que se han repetido varias escenas que me han sobrado. por todo lo demás, La Pirámide Roja es un libro que, en su mayor parte, es una trama rápida que te engancha desde el primer momento, no ya por el mundo egipcio en el que nos vamos a adentrar, sino también por una magia que también estará presente y que atrapa por completo. A pesar de esos momentos de pausa que nos dará el autor para poder coger aire y prepararnos para otra ronda de actividad en la que tendremos que enfrentarnos a despiadados demonios, la trama no decae. Es un argumento potente que sabe como mantener al lector atento a cualquier dato o suceso que ocurra. Va a destacar, sobre todo, las escenas donde muchas pruebas peligrosas se interpondrán en su camino hasta el enfrentamiento final, por lo que tendremos un libro repleto de acción, acontecimientos que nos darán más de una sorpresa ante las revelaciones de una información que se mantenía guardada y que nos dejará con los ojos abiertos, un ritmo muy fluido que no cansa y que, gracias a su ligereza, será una historia muy llevadera que se hará bastante cómoda y que dejará una sensación muy buena para seguir con los siguientes libros.
Creo que ya os podéis hacer una idea de aquello que vengo a destacar de esta nueva trilogía ambientada en una sociedad poco explotada y que da mucho juego, ¿verdad? Pues sí, quiero hablar de la mitología egipcia y lo que Riordan hace con ella, creando algo totalmente nuevo con hechos que están plasmados en la historia de la humanidad, que hacen que esta aventura sea aún más increíble y emocionante de lo que ya es. Como se nota que el autor entiende de lo que está hablando y, para llamar a esos que están empezando en el mundo de la literatura y que, probablemente, echarían para atrás un libro gordo solo de mitología, hace que este mundo sea agradable, activo, efectivo y muy ingeniosamente elaborado. Me ha encantado la mezcla que, una vez más, ha hecho entre el mundo antiguo, el de los faraones y sus propias creencias en los diferentes dioses, con el mundo actual. Gracias a ello he podido conocer mucho más de todo lo básico: como se organizaban antes en Egipto, como funcionaba el árbol genealógico de los dioses, cuales eran sus poderes, que es lo que hacían... y me ha estado entreteniendo bastante ir descubriendo poco a poco todo lo que se traían entre manos. Después, algo que también creo que le ha dado un soplo de aire fresco a la trama es la incorporación de una magia poderosa y antigua que tiene que ver con los famosos jeroglíficos. Son hechizos que hacen solamente los magos, una rama poderosa dentro de la jerarquía social de la sociedad egipcia y es algo que me ha resultado renovador. Desde hace tiempo la magia en la literatura se ha quedado algo estancada y, aunque sí haya dado con cosas diferentes en anteriores lecturas, esta magia me ha gustado porque ha conseguido dar otro lavado de cara.
La forma de narrar de Rick Riordan sigue siendo la misma que encontré cuando leí hace unos meses los primeros libros de Percy Jackson. Es un autor que va directo a lo que quiere, enganchando al lector ante cualquier giro en la trama que conlleva a una misión peligrosa y absorbente. En este libro sí que lo he visto algo más pausado y repetitivo,a largando escenas que, o bien no era necesario hacerles eso, o bien con una vez que se mostrara ya era suficiente. Pero, por lo demás, tiene una pluma inteligente que se mueve por un ambiente que conoce a la perfección. Clases de historia, de valor y de unión familiar es lo que nos da en el inicio de esta trilogía, viendo como el autor crea las cosas de manera muy fácil para su imaginación. Ha dejado momentos con los cuales me he tenido que reír sí o sí, las incógnitas a las preguntas las ha ido manteniendo ocultas hasta el final de una manera maravillosa, la ambientación es palpable gracias a sus cortas y seguras descripciones, que no han hecho más que favorecer el ritmo de lectura para cubrirnos por completo.
En cuanto a los personajes de La Pirámide Roja, Riordan también ha sabido darles forma, aunque todavía quedan cosas por conocer de cada uno de ellos. Empezando por Carter, es un chico que ha mostrado una evolución favorable a lo largo de la lectura. Al principio se veía como un chico que no se podía valer por sí mismo, que siempre tenía que tener la protección de su padre para poder salir de cualquier apuro. El haber estado viviendo con él no le ha dado la oportunidad de aprender a defenderse por sí solo y eso ha llevado a que, en un principio, Carter tuviera un miedo que lo le dejase protegerse él mismo y a su hermana, quien era la que siempre andaba detrás de él. Es un chico tímido e inteligente que, como ya digo, se va volviendo mucho más maduro y valiente, cosa que me ha gustado. Sadie es un personaje que me ha acabado enamorando por completo. Tiene las ideas claras y es bastante madura para su edad. Al sentir un rechazo que la ha llevad a vivir con sus abuelos desde que su madre murió, los celos por la vida que ha llevado su hermano se notan, pero no por ello deja de lado a alguien que quiere con todo su ser. Son personajes distintos, como el día y la noche, y es Sadie la que empieza fuerte, la que se va llenado de seguridad y no se echa para atrás cuando tiene que enfrentarse a dioses poderosos. Pero, si Cartes avanzaba hacia adelante, vemos como Sadie empieza a preguntarse todo lo que le rodea y se va llenando de inseguridades que la hace tambalearse un poco. Por todo lo demás, es una chica sarcástica con mucho carácter, con un humos y humildad únicas.De los otros personajes, destacar a Amos, un hombre que se preocupa por aquellos a los que tiene que cuidar, defendiéndolos e intentando no llevarlos directamente a la boca del libro; Bast, una diosa guerrera que también tiene sus puntos fuertes, una mujer fuerte y decidida que también está dispuesta dar su vida por aquellos a los que tiene que proteger; Zia, una chica que saldrá poquito en esta primera arte pero que espero poder encontrar en las siguientes, alguien de carácter también muy notorio que ayudará a los hermanos Kane en todo momento.
En definitiva, La Pirámide Roja es el inicio de una trilogía de aventuras llena de mitología que aporta frescura y originalidad a las tramas de esta clase. Con unos personajes que se hacen querer, una historia de Egipto fantástica y una ambientación increíble, este libro tiene todos los ingredientes para llamarte y no soltarte hasta que has terminado de leer la última frase. Tengo ganas de seguir con esta épica aventura.
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